Sin duda la llegada de un nuevo hermanito o hermanita a la familia supone un cambio grande para todos, pero sobre todo para el primer hijo que pasará a convertirse en hermano mayor.
No me gusta dar consejos, pero sí compartir cosas que a mi personalmente me funcionaron muy bien y me ayudaron a preparar a mi hijo mayor para la llegada del hermano.
– Hacerle participe durante el embarazo, enseñarle las ecografías del hermano, pedirle que me ayude a sacar la ropita del bebé, explicarle porqué la tripa me empezaba a crecer… Creo que pese a que era aún muy pequeño, empezaba a entender que algo llegaba.
– Reforzarlo con la ayuda de libros, en concreto compré uno que se llama «Lulú tiene un hermanito», lo leíamos juntos por las noches y eso creo que le ayudó mucho.
– Hacer los cambios necesarios antes de la llegada del hermano, si por ejemplo todavía duerme en la cuna creo que es buena idea pasarlo a la cama antes de que el pequeño llegue. Para evitar ese sentimiento de que le quitan lo suyo. Lo mismo con el chupete, mejor quitárselo antes y así evitamos que luego se lo quiera intercambiar con el bebé.
– Comprar algún regalo y decir que se lo ha traído su hermano pequeño. Esto es algo que todo el mundo me aconsejó, si el hermano llega un regalito chulo seguro que será mejor recibido.
– Contarle todas las ventajas que tiene ser hermano mayor y poder tener a alguien con quien jugar siempre.
Y una vez que el bebé haya nacido, para mi hay dos factores claves para evitar los celos:
– Mantener las rutinas del mayor y buscar momentos para hacer cosas sólo con el.
– Hacerle participe de los cuidados del pequeño, nos puede ayudar en pequeñas tareas diarias y a ellos les encanta.
Espero que os ayuden estas ideas y si tenéis algún otro truquillo, me encantará saberlo!