Como todos sabemos, los bebés son muy delicados, por lo que hay que cuidar cada detalle del entorno que los rodea, desde el ambiente de la habitación hasta la cuna o los accesorios que la complementan.
A la hora de dormir, el descanso de nuestros peques se ve afectado por diversos factores: la temperatura (tanto la ambiental como la corporal), la postura o inclinación del bebé, la humedad, etc.
Nosotros, como padres, podemos tratar de controlarlos y acondicionar el lugar en el que se encuentran para que este sea el apropiado. Tal y como os hemos comentado en posts anteriores, los nidos de colecho son el sitio perfecto para garantizar que nuestros hijos duerman en un lugar suave, seguro y cómodo.
Pero además hemos diseñado una serie de accesorios que completan la higiene, seguridad y confort de nuestros nidos.
Evitar el reflujo
Es muy común que los recién nacidos regurgiten o devuelvan un poco de leche en sus primeros meses de vida. Esto se debe a que el músculo de su esfínter esofágico no está completamente desarrollado, haciendo que parte del alimento ingerido salga de su estómago.
Pero ¿qué podemos hacer para que esto no ocurra o, por lo menos, para que no sea demasiado incómodo? Uno de los consejos sería mantener al bebé durante media hora en posición vertical después de haber tomado la leche, además de frotar suavemente o darle palmaditas en la espalda para hacerle eructar tras haber realizado la toma de cada pecho.
En Petite Marmotte sabemos por experiencia propia lo que es y entendemos que a veces puede ser frustrante. Por eso hace tiempo pensamos en un producto que pudiera mejorar su digestión: la cuña antireflujo.
La inclinación ideal para los bebés es de un 15% y esta cuña nos la proporciona elevando la parte superior del cuerpo. Gracias a ella, conseguimos que los ácidos estomacales no suban y no lleguen hasta la garganta. Además, mejora la respiración (sobre todo cuando los bebés están constipados) y previene las infecciones de oído. Nosotras recomendamos ponerla dentro o debajo del nido y posteriormente, cuando crezcan, debajo del colchón de la cuna o la cama.
Accesorios para mantener el nido siempre limpio.
A menudo a los bebés echan un poco de leche después de las tomas, esto hace que la zona de la cabeza sea la que más se mancha . Colocando nuestra sábana protectora, nos aseguramos que tiene siempre limpia y seca esa zona y nos ayuda a mantener el nido siempre limpio. De esta forma evitamos tener que lavar el nido completo.
¡Descubre las sábanas salvababas de Petite Marmotte!
Son súper suaves, ideales para nuestros bebés, ya que por un lado están hechas de algodón 100% orgánico y, por el otro, de rizo de toalla. Además, están diseñadas para encajar perfectamente en nuestros nidos de colecho, siendo un apoyo suave y fácil de lavar para su cabecita; Al no estar unida al nido, es mucho más cómodo lavarla sin tener que desmontar y lavar el nido completo. También aconsejamos ponerla en estos meses de verano, sobre todo en los días de más calor, para evitar que les sude mucho la cabecita.
Evitar que pasen frío
Otra de las grandes dudas que nos surgen al ser padres es cómo abrigar a nuestro bebé correctamente. Nosotras siempre utilizamos las mantitas Petite Marmotte porque son muy suaves y calentitas. Con ellas te asegurarás que tu peque dormirá a gusto. Por un lado es de tacto polar y, al contar con tratamiento antipeeling, evita que le salgan bolitas. Y por el otro lado es de algodón orgánico, como todos nuestros productos.
Las mantitas son los accesorios perfectos para cubrir al bebé tanto dentro como fuera de casa: en el nido, en el cochecito de paseo, etc. Es tan práctica… A nosotras nos encanta. Además, la podrás amortizar bien ya que tiene el tamaño ideal para usarla durante mucho tiempo (100 × 75 cm).
Asimismo, el saco 4 estaciones es otro producto que te va a ser de gran ayuda y podrás utilizarlo durante todo el año. Este consiste en un saco con distintos rellenos para poder ir adaptándolo a cada estación: en invierno sus dos rellenos lo abrigarán para mantener su temperatura corporal y que no pase frío, en primavera y otoño se quedaría con un único relleno, y en verano se puede usar como una sábana fina.
Es un saco muy útil y cómodo que te facilitará controlar la temperatura corporal ideal y te asegurará que no se va a destapar. Cabe destacar que la cremallera lateral está protegida para que no esté en ningún momento en contacto con el bebé y que ésta se cierra hacia abajo, facilitando así el cambio de pañal sin tener que destapar al peque.
Por último, nos gustaría recordaros que una vez que vuestro bebé ya no quepa en el nido, podéis comprar fundas para los rulos protectores y convertir el rulo del nido en cojín protector para la cuna o la cama. Es ideal para ayudar en la transición de la cuna a la cama.
¡Ah! Y también tenemos fundas extra para el nido, siempre viene bien tener un recambio para poder ponerlo mientras lavamos el original.
Nuestra experiencia como madres nos ha enseñado que ante todo tenemos que ser prácticas y esperamos que todos estos productos os lo resulten!
Nos encantaría leer vuestros comentarios 🙂