Algodón orgánico: ¿qué es?
Seguro que te han hablado en más de una ocasión del algodón orgánico y no tenías muy claro qué lo hacía diferente del algodón tradicional. En este post, ¡nosotros te lo aclaramos!
Este algodón es cultivado y crece en campos de tierra fértil libres de pesticidas, herbicidas y fertilizantes químicos sintéticos, y además, es hilado y producido sin químicos tóxicos. Además, la agricultura orgánica respeta los ciclos de la tierra y procura mantener un equilibrio sobre la misma y preservar la tierra para usos futuros.
Todos nuestros productos tienen un certificado GOTS, que aboga por un procesamiento textil que no dañe el medioambiente y tenga en cuenta la conciencia social: además de la propia producción sostenible, también cuenta con unas directrices para las empresas en toda la cadena de valor, como el comercio justo, que garantiza que se haya producido en condiciones seguras, saludables y equitativas. En definitiva, la certificación GOTS es una garantía de responsabilidad social y ecológica.
¿Por qué es diferente del algodón tradicional?
El algodón tradicional, a diferencia del orgánico, utiliza alrededor de un 25% de los insecticidas y pesticidas fabricados en el mundo. Además, en cada etapa del proceso de fabricación de la prenda, se suelen añadir un montón de compuestos químicos dañinos, como cobre, zinc, suavizantes, abrillantadores, amoníaco, etc: ¡todos ellos altamente contaminantes!
Asimismo, los tejidos de algodón orgánico son más suaves, transpirables y resistentes que los fabricados con algodón tradicional. Mientras el algodón tradicional puede empezar a descomponerse tras 10 – 20 lavados, el orgánico aguanta más de 100 lavados y libera la suciedad fácilmente.
¿Por qué el algodón orgánico es lo mejor para la piel del bebé?
La piel de un recién nacido es mucho más delicada, frágil y absorbe todos los componentes de las prendas con mucha más facilidad, por lo que son más propensos a tener problemas de salud o alergias derivadas de los pesticidas y otras sustancias. De ahí, la importancia de abrigar a nuestras pequeñas marmotas con Sacos de Dormir de Bebé que respeten su piel y estén libres de residuos tóxicos: ¡su piel lo agradecerá!
En conclusión, cada vez que hacemos uso de un producto orgánico certificado, estamos añadiendo un valor añadido, un compromiso social y medioambiental. En Petite Marmotte, nos gusta cuidar tanto de la piel del bebé, como del medioambiente y las personas. ¡Debemos ser responsables!